En el año de 1994, el edificio ubicado en la Ciudad de México, mejor conocido como Ajaracas, sufrío daños severos durante el terremoto que desoló la ciudad capitalina de México el 19 de septiembre de 1985, un sismo de 8.1 grados Richter, y trás el eminente daño, sus dueños retomaron su remodelación hasta el año de 1994, mismo dificio que se encuentra frente al sitio arqueologico más importante de esa ciudad, encontrandose algunos restos que de inmediato llamaron la atención de la antropología mexicana.
Después de dicho descubrimiento, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en México, se enfoco a realizar estudios a diversas osamentas de aves encontradas en el lugar, en su mayoría de Colibríes. Ya que los Aztecas relacionaban a estas aves con Huitzilopochtli, el Dios de la Guerra. Esto debido a la similitud de dicha ave con su agrasividad mostrada para defender a su hembra de otro macho acechador, por ello se ofrendaban a su Dios dichas aves.
Los colibrí eran nombrados por los mexicas como «Huitzitzilin», los restos de ofrendas se localizaron en el Templo Mayor de Tenochtitlan, en el ala sur donde se le dedicaba ofrendas al Dios de la Guerra, Huitzilopochtli. El INAH informó que lo encontrado se trataba de unas ofrendas con restos en huesos de colibríes y otras aves,a si como de diversos animales, pero lo que llamó la atención fue la numerosa cantidad de restos d ecolibríes encontrados.
Tras su hallazgo, todo el contenido de las ofrendas fue sometido a estudios previos, de investigacion,a si como a pruebas cientificas para determinar su edad en periodo y su finalidad historica. Los cientificos y estudiosos determinaron que los restos de colibríes datan del año 1502 la primer ofrenda, y del año 1521 la segunda. esto nos remonta a que fue antes de la invasión española en aquella época de colonización. En una d elas dos ofrendas se localizaron restos de colibrí, dos aguilas, un esqueleto de garza, caracoles marinos, moluscos, un pez sierra, un disco de turqueza y obsidiana con la imagen del Dios Huitzilopochtli, así también puntas de pedernal y de obsidiana.
En la segunda ofrenda los cientificos descubrieron diez y seis restos de colibríes, un águila, una tortuga, moluscos de diversas clases, serpientes de cascabel, de las más venenosas de la región, flores hechas polvo, cascabeles de cobre y de tejido de canastos. Lo que sorprendió a los investigadores fue el hecho de ver la perfecta conservación de los huesos de colibrí. Se teterminó con pruebas de laboratorio que estos animales recibian un tratamiento especial previo para poder ser ofresidas ante el Dios o la divinidad de la guerra. Se dedujo que los colibríes pertenecias a diversidad de especies, tanto como los que abundan en el centro de México, asi como los emigrantes que recorren desde el norte de México hasta el sur en Honduras y Nicaragua.
La historia perdio sus legados más importantes de la cultura Azteca y de otras en México, después de aquella invasión española en la época de la colonización, donde se destruyeron inmensidad de legados historicos. De la misma forma un loco clama la hora de que alguien alce la voz y diga que se ha guardado algo relevante sobre aquellas culturas, pero solo un milagro podría realizarlo.
esto es re lindo el helado de la letra e soy stefania quevasdi