En nuestro Sistema Solar podemos ver evidencias de agua en las condiciones más raras. El Sol, donde aparece en estado de vapor en las manchas solares y también en nuestra Luna.
En el año 1994, el radar de la sonda Clementine encontró depósitos de hielo en el fondo de varios cráteres profundos en donde hay una oscuridad continua.
Se piensa que estos abarcan entre 10.000 y 50.000 kilómetros cuadrados en el polo norte y hasta 20.000 en el polo sur.
El hielo también se encuentra en Europa, uno de los satélites jovianos.
Cuenta con una temperatura superficial de -170ºC (la más baja alcanzada en la Tierra había sido -89ºC) este cuerpo cuenta con un aspecto completamente congelado.
Pero debajo de su cáscara helada de entre 10 y 100 kilómetros de espesor se extiende un inmenso mar de agua salada.
Si observamos a Urano y a Neptuno no dejaremos de darnos cuenta que nos brindan su gotita de agua. Si bien es cierto que no se conoce su estructura interna la opinión de varios investigadores demuestra que estos planetas poseen tres capas: una atmósfera de hidrogeno y helio, un manto posiblemente en estado liquido –formado por agua, metano y amoniaco- y un núcleo que esta constituido con la misma composición a la que hay que agregar un conjunto rocoso.
Por otra parte hay investigadores que se inclinan a pensar que tanto Urano como Neptuno están formados solo por dos capas: una atmósfera muy pero muy densa que tiene un 50 por ciento de agua y un núcleo rocoso.
Para ser sincera nos encontramos ante uno de las grandes incógnitas de la planetologia y las suposiciones se disparaban.
Hay hipótesis que nos llevan a pensar que existe un océano supervaliente ubicado a 8.000 Km. de profundidad.
El interior del Titán esta formado por hielo que se encuentra a diferentes presiones y una capa en estado liquido.
Nuestro vecino Marte hace unos cuantos millones de años era totalmente diferente a lo que hoy sabemos. Se sabe que era más calido y su atmósfera más densa y por lo visto había agua en su superficie.
A través del Ares Vallis llego a pasar 1.000 millones de metros cúbicos por segundo. Para que tengas una idea de lo que estamos hablando, te contamos que por ejemplo el caudal del Amazonas es de 300.000 o los 60 millones de la inmensa catarata que se formo al abrirse el estrecho de Gibralta y que tubo la capacidad de rellenar lo que en la actualidad forma el Mediterráneo después de que este se resecara hace 5.5 millones de años.
Muchos meteorólogos se arriesgan en afirmar que en el Planeta Rojo existió un gran océano. Que tenía ni más ni menos que 65 millones de metros cúbicos y una profundidad de 1.700 metros. Supuestamente llamado Oceanus Boreales llegaba a cubrir las llanuras del tercio norte del planeta y coexistir con un inmenso Polo Sur.
Por todo lo que te contamos, es fácil deducir que todo el universo esta lleno de agua.
Imagen de Neptuno.
el sol no es todo amarrillo sino tiene algunas manchas de color naranja