Te vamos a contar algunos secretos de estos muñecos que ya están acostumbrados a atravesar experiencias dolorosas dentro de un automóvil.
Estos muñecos son utilizados por la Euro NCAP, un programa europeo de evaluación para nuevos autos. Con este programa se evalúa a la mayoría de los autos que están en este momento en el mercado mundial. Se usan más de 1.000 fotogramas por segundo para evaluar uno a uno los daños que sufren estos muñecos, con ellos se pueden estudiar cada detalle de cómo se mueve el cuerpo cuando sufren un accidente automovilístico.
Estos robots cuestan alrededor de 230.000 dólares y están llenos de censores electrónicos, cada uno de estos sensores son capaces de registrar las reacciones del cuerpo durante la coalición.
El interior de los vehículos se pintan con diferentes colores, si al chocar el vehículo ninguno de sus ocupantes se mancha de pintura esto demuestra que no han sufrido ningún impacto contra el habitáculo.
La primera muerte que se ha registrado en accidentes automovilísticos fue en el año 1869, en el año 1904 un estudio realizado por la policía de Londres arrojaba un total de 215 muertos, cifras parecidas se registraron en Berlín.
Con el paso de los años y el crecimiento de la industria automovilística los accidentes dejaron de ser excepcionales para pasar a convertirse en cotidianos.
En el año 1955 Mercedes, en Europa comenzó sus primeras pruebas de choque, tres años después los implemento General Motors en Estados Unidos. Por ese entonces no se habla de seguridad activo o pasiva, pero en estas primeras pruebas se pudo comprobar un dato que fue estremecedor, un choque frontal a 50 km/h puede poner la en peligro la vida.
A partir del año 1966 se comenzaron a usar los Dummies de manera habitual para la investigación sobre accidentes.
Es increíble la cantidad de cosas que se pusieron a prueba para pretender entender el comportamiento del cuerpo humano cuando es sometido a fuertes aceleraciones que se experimentan en un accidente.
La fabricación de un dummy (tonto en ingles) requiere mucha atención y cuidado solo hay dos empresas en el mundo capaces de fabricarlos a escala.
La estructura corresponde a normas diseñadas con el acuerdo de la Administración estadounidense y los fabricantes de antes para que todos tengan las mismas medidas de seguridad. Los últimos dummies para choques frontales fueron definidos en el año 1972, pero han crecido desde entonces, lo que si se ha creado son nuevos muñecos para analizar choques que fueron diferentes a los frontales.
El problema más grave que los analistas deben afrontar es que no hay repetición posible, por este motivo han surgido modelos matemáticos para simular el comportamiento del dummy estrellándose en la computadora a bordo de un modelo virtual del automóvil.
Los dummies virtuales parecen ser los intermediarios más realistas para crear las mejores soluciones. En un día se pueden ensayar varios diseños alternativos, y dejar la prueba real solo para demostrar la mejor solución para cada caso.
Imagen de un dummy.