Curiosidades Lingüísticas XI – La tenia

Buenas, y ajetreadas, noches. Hace más de una semana que no hablamos de lingüística, aunque realmente de lo que hablemos aquí es una cosa muy light, todo hay que decirlo, pero al fin y al cabo, lingüística es y curiosidades son. Hoy, en nuestras Curiosidades Lingüísticas, tenemos algo muy especial, una palabra que tiene mucha relación con la medicina, pero que a su vez tiene mucha relación con un objeto de la vida más o menos cotidiana, curiosa esta relación.

Vamos a hablar de la palabra «tenia», que, como muchos sabrán, y si no lo saben se lo digo yo –puede que no estén pensando en el significado–, es ese parásito que se mete en el intestino y devora, sin piedad, todo lo que comemos. También se le llama “solitaria”, pero para lo que vamos a tratar en este artículo es más conveniente hablar de ella como “tenia”, de modo que así se llamará a partir de ahora en estas líneas. La tenia es un animal de una longitud que podrá variar, pero que suele ser larga. Y como larga que es, para caber en el intestino ha de estar recogida, como es evidente, porque si no, no podría alojarse ahí. Bien, pues este animal encogido, que a su vez es plano y de piel muy fina, tiene cierta semejanza con una cinta, ¿no es así? Me estoy refiriendo a una cinta de elástico.

Bien, pues ahora viene la curiosidad. ¿Saben qué significa, en griego moderno, la palabra “tenia” –una transcripción de sus sonidos, es evidente que no se escribe así en la lengua griega–, así, como suena? Suena exactamente igual que la palabra que define al bicho ese, ¿no? Pues es algo parecido. “Tenia” significa en griego moderno “cinta”, pero cinta en cuanto a cinta de vídeo, a película.

De esa manera, al decir el nombre del que aquí conocemos como el parásito, allí están nombrando a una cinta. Y se llama así, entre otras cosas, por esa relación que mantiene con el objeto.

Tengo que aclarar, no obstante, algo con respecto a este tipo de artículos, me refiero a los que hablan de la lengua griega y la lengua latina como curiosidad de lo que se dice actualmente. Hay muchas ocasiones en las que he dicho que una palabra en griego o en latín tiene una traducción al castellano porque se parece a un objeto que vemos a diario. No es totalmente cierto, es sólo, quizás, un medio para aprender ese tipo de palabras, si bien muchas de ellas, la mayoría, tienen bastante relación y, posiblemente, se dicen en español de esa manera.

Y nada más que añadir. Espero que les haya resultado interesante la curiosidad de esta semana, y espero verles por aquí de nuevo dentro de siete días, esta vez con seguridad. Perdónenme los presentes la ausencia de la semana pasada, pero, como ya expliqué en el correspondiente artículo en el blog de literatura, las necesidades que exigía la universidad eran demasiado necesarias, valgan las redundancias.
Que pasen una semana, y que disfruten de las curiosidades de la vida, que son muchas.

1 comentario en «Curiosidades Lingüísticas XI – La tenia»

  1. componen de una cabeza (escólex) y numerosos segmentos o proglótidos, tienen forma de cintas, los segmentos contienen los órganos reproductores de uno y otro sexo, además de huevos. Los segmentos posteriores se desprenden y se expulsan del animal parasitado junto con las heces.
    Los segmentos que se han expulsado pueden encontrarse cerca del ano del animal, y su aspecto es semejante al de granos de arroz
    En el ciclo vital de todas las tenias existe un huésped intermediario. No puede ocurrir transmisión directa de un huésped en el que existe el parásito adulto, a otro huésped de la misma especie. Cierta parte de la formación de la tenia inmadura suele ocurrir en una especie diferente de la que el parásito infecta cuando adulto. La especie en que el parásito inmaduro debe pasar cierta parte de su ciclo vital antes de infectar el huésped final, se llama «huésped intermediario».
    La prevención de las teniasis se implementa con el control de pulgas, evitar la depredación, no administrar carne cruda de ningún animal y desparasitar cada 4 meses.
    Hidatidosis (echinococcus granulosus)
    Es una enfermedad producida por un parásito llamado Echinococcus granulosus y los huéspedes definitivos (son aquellos donde se hospeda el parásito adulto) son los perros domésticos y algunos cánidos silvestres y vive en el intestino delgado, mide de 3 a 6 mm de longitud, es un parásito «chato» (tenia) y su cuerpo tiene tres segmentos y en el último tiene varios cientos de huevos que se desintegra en el medio ambiente cuando es eliminado con las heces del perro. Cada huevo contiene un embrión que debe ser ingerido por un huésped intermediario (es aquél donde se desarrolla la forma juvenil del parásito) y son ovinos, caprinos, bovinos, cerdos, equinos, camélidos (asiáticos y americanos), cérvidos y el hombre. El embrión se libera en el intestino delgado de los huéspedes intermediarios, atraviesa la pared intestinal y es llevado por la corriente sanguínea a varios órganos, donde se desarrolla el estadío larval, hidátide o quiste hidatídico. La localización más frecuente de estos quistes se halla en hígado y pulmones, pero en ocasiones puede ubicarse en otros órganos (huesos, riñón, cerebro, etc.). El interior del quiste está lleno de líquido donde flotan unas vesículas prolígeras (que son el elemento infectante) que se las llama «arenilla hidatídica». El ciclo se completa cuando el perro u otro cánido ingiere vísceras con quistes hidatídicos que contienen quistes fértiles de un ovino o de otro huésped intermediario.
    En el hombre las tasas de contagio más altas se registran en lugares ganaderos, principalmente en los de cría de ovinos. En esencia se trata de una infestación del medio rural, aunque también ocurren casos en áreas urbanas.
    Muchos quistes son asintomáticos durante toda vida., pero en otros casos el quiste puede alcanzar un tamaño muy grande y contener varios litros de líquido, el gran peligro, a veces con riesgo de muerte, son las roturas de los quistes que pueden provocar una reacción alérgica (shock anafiláctico), también existe una diseminación del quiste con la formación de nuevos y numerosos quistes hidatídicos. La principal sintomatologia está dada por la presión que ejerce sobre los órganos afectados a medida que aumenta de tamaño.
    El contagio en el hombre sucede cuando el perro se lame el ano y existen huevos en el mismo, que mediante la lengua disemina por todo su cuerpo, el hombre puede contaminarse las manos al tocar el animal. El contacto cercano con el animal y las prácticas deficientes de higiene personal son factores importantes en el contagio del perro al hombre. Otra fuente de infección importante pueden ser las verduras y el agua contaminadas con huevos del parásito. Aunque la hidatidosis suele ser una enfermedad que afecta a la población rural, ocurren casos urbanos con frecuencia de la enfermedad cuando los perros son alimentados mediante vísceras crudas contaminadas con huevos del parásito.
    Dipylidium Caninum
    Es la tenia común del perro y también se encuentra en el gato y a veces en humanos. En animales, este parásito se encuentra en el intestino delgado, cuando la infestación es grave o el animal se encuentra en malas condiciones de salud, el dipylidium caninum puede causar molestias abdominales, pérdida de peso o ambas cosas.
    Los huéspedes intermediarios de D. caninum son la pulga del perro, Ctenocephalides canis, la pulga del gato, Ctenocephalides felis, y la pulga humana, Pulex irritans.
    Las larvas de estas pulgas se infestan al ingerir los huevos de la tenia. Los perros, gatos y a veces humanos son parasitados al deglutir pulgas infestadas. Si se quiere controlar adecuadamente a Dipylidium caninum se deben también controlar adecuadamente las pulgas en perros y gatos.
    Más información en transmisión de tenias por pulgas.

    Gusanos

    Las tenias son gusanos chatos y segmentados. Consisten en una cabeza, cuello y luego una cantidad de segmentos. Mediante su cabeza se adhieren generalmente a la pared del intestino del animal.
    Cada segmento tiene sus propios organos reproductores. Continuamente se están formando nuevos segmentos en la región del cuello del gusano, mientras que los del final se caen y mueren cuando maduran. Estos segmentos maduros contienen un gran número de huevos. Se pueden ver (los segmentos) cerca de la zona perianal del perro. Si recién llegaron a la zona puede verse como se mueven, si hace tiempo están allí se asemejan a granos de arroz crudos. Las infecciones por tenias generalmente se diganostican encontrando estos segmentos en el excremento del perro.
    Las tenias tienen un ciclo de vida que precisa un huesped intermediario. Estos huéspedes pueden ser pulgas, pescado y animales domésticos como cerdos y ovejas. Todas las formas adultas de las tenias viven en el sistema digestivo del perro. Es interesante saber que las mismas tenias no tienen aparato digestivo, sino que absorven nutrientes a través de su piel.

    Hay por lo menos tres tipos de tenias (Anoplocephala perfoliata, Anaplocephala magna y Paranoplocephala mamillana) son comúnmente encontradas en los caballos, y son muy difíciles de diagnosticar. Los exámenes coprológicos que son usados comúnmente para diagnosticar otros parásitos intestinales del caballo, tal como lombrices intestinales y pequeños estróngilos, no son eficaces en el diagnóstico de tenias y de pequeños estróngilos. A pesar de que las tenias son comúnmente vistas durante las cirugías abdominales, se pensaba que eran solamente espectadores que no causaban ningún problema para el caballo. Solamente recientemente los investigadores determinaron que tanto como el 22 por ciento de cólicos espasmódicos (gases) y casi el 80 por ciento de las obstrucciones de origen ileocecal (la coyuntura entre el final del intestino delgado y la abertura hacia el colon) están asociadas con las tenias.

    La Tenia o Solitaria

    Si hay un parásito que sin duda pone los pelos de punta tan solo con la idea de poder albergarlo en el interior es la tenia. No es que sea especialmente peligroso ni mortal de hecho en algunos casos el paciente no sufre ningún tipo de molestia y puede llegar a “convivir” con su huésped durante largas temporadas el problema radica cuando uno piensa que puede tener en su interior un “gusano” de varios metros de longitud.
    Los cestodos o tenias son gusanos planos, hermafroditas (pueden reproducirse con ellos mismos y poner huevos sin necesidad de otro ejemplar), son animales que viven solos en el interior del intestino delgado y grueso del individuo, el nombre de solitaria procede del hecho que siempre son individuos aislados e incluso pueden completar su ciclo vital, incluida la reproducción sin haberse encontrado con otra solitaria.
    No poseen aparato digestivo y se alimentan por absorción a través de su piel. Están formados por una cabeza o escólex, con ventosas y a veces armada con ganchos con los que se fijan a las paredes del organismo.
    Las tenias pueden crecer varios metros de longitud y se han reportado casos de más de 10 metros, imaginaros un gusano de 10 metros adherido a las paredes de vuestro intestino, la solitaria posee pequeños ganchos o ventosas con los que se aferra a las paredes intestinales. El animal se desplaza por el interior del organismo y aunque raramente se puede sentir sus movimientos se han reportado casos en los que la tenia ha salido del cuerpo total o parcialmente por el ano.
    Su cuerpo esta formado en algunos casos por más de 900 segmentos, anillos que son capaces de producir huevos independientemente, estos “proglótides” se separan y salen con las deposiciones. Esto conlleva un peligro de contagio, pues las personas tras rascarse o simplemente realizar labores de higiene después de defecar pueden portar estos huevos en sus manos, manipulando alimentos se puede contagiar a otras personas.

    Responder

Deja un comentario