En las montañas ubicadas en el sur de China existe una etnia, en la que las familias dedican sus vidas a realizar los cortejos que llevan a cabo sus hijas para poder atraer a los futuros novios.
En el sur de China, en la provincia de Guizhou, lugar donde los turistas no tienen acceso, vive un grupo de etnias que siguen con su habitual vida rural y continúan con las tradiciones ancestrales. Este es el caso de los Miao, un matriarcado en donde las jóvenes poseen una rara libertad sexual, las familias llegan a ahorrar durante casi toda la vida para lograr que sus mujeres se conviertan en princesas de plata. Según las tradiciones de esta zona, los candidatos a novios heredan como dote vestidos, collares y coronas de plata para lucir durante las festividades. En la elaboración de este vestuario ayudan tanto las mujeres como los hombres y supone entre 5 y 7 años de mucho labor.
Y aun mayor es esfuerzo económico ya que la indumentaria de gala y los complicados adornos que la acompañan pueden costar alrededor de 30.000 yuanes (3.500 dólares). Para tener una idea de los que esto significa, debemos tener en cuenta que el presupuesto de una familia oscila entre los 500 y 600 yuanes al mes, es decir, 70 dólares.
Así con la llegada de la primavera, las princesas sacan en procesión de 8 a 15 kilos de finas telas, tocados y joyas, según la capacidad económica de su familia.
Cuanto mayor es el despliegue, mayor es la posibilidad de conseguir a un buen candidato.
Más info: Revista Muy Interesante
Foto: Princesa Miao