Bronco es un adjetivo que se refiere a un sonido extremadamente fuerte, que es áspero y sin armonía. También se puede usar con las personas para definir un carácter tosco que resulta desagradable.
En general, se emplea para hacer referencia a la característica brusca y difícil de controlar de cualquier elemento.
A continuación etimología y significado de la palabra bronco.
Bronco
El origen de la palabra bronco parte del término en latín “bruncus”, que a su vez, es una forma compuesta de dos palabras latinas: “broccus”, que se traduce como “puntiagudo”, y “truncus”, que se entiende como “tronco” o “cortado”. Aunque otras fuentes proponen que “bruncus” es una forma alternativa de “brunchus”, que se traduce como “bronquio”, y se puede entender como “gruñido”. Esto tiene mucho sentido si se toma en cuenta el significado convencional de la palabra bronco, ya que “brunchus” se entendería como un sonido áspero y nada agradable.
En México, Estados Unidos y Canadá, el término bronco se usa para denominar a un caballo que no ha sido domado. Puede referirse a un caballo salvaje que ha vivido toda su vida lejos del contacto con los seres humanos, y que por extensión, resulta agresivo y difícil de tratar.
Del mismo modo, bronco también se le llama a los caballos domésticos que no han sido adiestrados para podérseles montar, o aquellos que han recibido un entrenamiento pobre o poco profesional, lo que resulta en una incapacidad para controlarlos como es debido.
También es el nombre que reciben los caballos que son usados en determinados eventos de rodeo donde son la principal atracción. Se caracterizan porque suelen dar patadas con sus dos patas traseras al mismo tiempo mientras saltan. Frecuentemente se puede apreciar esa actitud mientras una persona los intenta montar, y permanecer en su lomo sin caerse. Los premios que se entregan en dichos eventos van dirigidos a aquellos individuos que logran mantenerse el mayor tiempo posible sobre el caballo.