Tripas

Este es el termino que usamos para nombrar al estomago y a los intestinos. Así que cuando oigas decir que a alguien se le revuelven las tripas es que esta hablando de alo que le resulta indigesto.
A menudo al hablar de cierta gente la describimos como una persona “visceral”, seguramente esta persona a la que nos referimos actúa según se lo dicta su estomago o sus intestinos.

El estomago de las personas es una especie de bolsa con forma de “J” que descansa justo por encima del área de tu ombligo.
Por debajo del estomago se unen las tripas tubulares que se encuentran enrolladas. Si nos ocupáramos de desenrollarlas veríamos que nuestras tripas tubulares cubrirían el largo de una cancha de tenis.
Los primeros seis metros de tripas son el intestino delgado. El metro y medio que resta es el intestino grueso. El intestino delgado se llama así porque es más estrecho que el intestino grueso.
Tiene más o menos el diámetro de un chorizo, si bien es suave y liso por fuera su interior es bastante rugoso. Este intestino recibe de parte del estomago la comida ablandada con aspecto similar al vomito.

Para ser precisos el vomito se llama así la comida procesada por el estomago sube y sale por tu boca. Pero se sigue camino a las tripas la forma correcta de llamarlos es quimo, el intestino delgado es capaz de absorber los nutrientes del quimo y los empuja hacia el intestino grueso.
Nuestro intestino grueso tiene la apariencia de una larga cadena de puños cerrados huecos. Los últimos 20 centímetros de este cordón de bultos lisos forman el recto. El recto es el lugar donde podemos almacenar los excrementos antes de que salgan por el ano.

La única labor que realiza el intestino grueso o colon es absorber el agua que queda en lo que queda de tu comida. La materia que luego saldrá de nuestro cuerpo se asienta en el colon de tres a diez horas, en este tiempo se extrae toda el agua y es convertida en materia fecal. Esta materia permanecerá estacionada en la última sección del tubo hasta que sea empujada dentro del recto y sale al exterior.

Para que puedas mover estas cosas asquerosas a lo largo de tus intestinos, tus tripas las pellizcan y las empujan y las pellizcan y las vuelven a empujar hasta que llegan a la meta.
Es algo similar a lo que pasa cuando vas apretando un tubo de dentífrico.
Por lo general vos no notas el trabajo que se va efectuando en tus tripas, salvo que tengas diarrea ocasional o que sufras de un síndrome crónico de irritación intestinal.
Por lo general cuando las tripas te molestan. La sensación no es agradable.

Las tripas no se caen, son sostenidas por la piel, las capas de grasas y los músculos abdominales. Que feo seria si no tuviéramos esas cosas y tendríamos que andar con las tripas colgando.

Unas curiosidades: vos sabias que esos ricos chinchulines que comes en los asados son intestinos de cerdo o de vaca asado. El intestino de cerdo rellenos es conocido como Hagáis, este es un plato muy típico de Escocia. Y también los tubos con los que son elaboradas las salchichas son intestinos. Pero en todos los casos que te mencionamos no debes preocuparte ya que los limpian muy bien antes de elaborarlos.

Foto: Intestinos